sábado, 14 de noviembre de 2009

El Ocaso

Quizás inspirado en nuevas formas de entender el lenguaje cinematográfico adquiridas en las últimas semanas, les presento este corto llamado El Ocaso, filmado nuevamente con la web cam, y cuya narración no busca ser coherente ni correcta, sino que pretende la apreciación desde la conjunción de imágenes y sonidos. Lo que acabo de escribir parece mucha cosa cuando en realidad no lo es, pero es algo. Véanlo.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

P2: Trailer.

P2. Algún momento del 2009. Prepárense.

domingo, 6 de septiembre de 2009

Lo que hace la falta de Internet.

Cinco días de reposo, arroz y pollo hervido. Intoxicación alimentaria le llaman. Para decorar la situación, no tengo internet en mi casa. Así que me dediqué al ocio y la contemplación. Vi varias películas, estoy leyendo un libro; incluso escribí una que otra cosa. El no ir a la escuela es un sentimiento tan bello que me resulta inabarcable una correcta descripción. Tengo barba, y el pelo revoltoso. Estoy a un paso de convertirme en historia.
De las películas, hubo una muy destacable: Ten items or less. Filmada de una manera sencilla, cargando casi todo el tiempo de metraje sobre los hombros de sus dos maravillosos actores (Morgan Freeman y Paz Vega), resulta en uno de esos filmes que te hacen sentir bien después de verlos. Que te dejan una enseñanza, no explícita, pero que está ahí. Una historia simple, con diálogos muy naturales y, por ende, muy efectivos. A la postre, aparece el viejito hindú que hace de Gupta en La Terminal, el gordito con la sexualidad a flor de piel de Superbad, y nuestro querido Sheldon de The Big Bang Theory. Película más que recomendable.
Una que vi ayer fue Buried Alive, que a pesar de la parsimonia con que la revista La Cosa la describe, es UNA MIERDA. Lisa y llanamente, una mierda. Terror es lo que te falta, pelotudo. Manga de hijos de puta. En fin.
Visiten mi blog de "metal downloads" (http://skalds-inferno.blogspot.com). Hay alguna que otra cosa buena.

Un saludo, hasta la próxima.

sábado, 15 de agosto de 2009

Skalds - Metal Downloads


Chivo de mi nuevo blog, esta vez para compartir la música que escucho. Un gusto haber charlado con usted.

http://skalds-inferno.blogspot.com

martes, 4 de agosto de 2009

Gaseosa, pan casero, lapicera y papel.


Comiendo pan casero hecho por mi abuela, escuchando primero Demonoid y después los primeros temas de un disco de Killswitch Engage, salió este dibujo. No es gran cosa, pero me recuerda a un poema que escribí el año pasado; poema que tal vez algún día publique acá. Es OBVIO que esto no merece una entrada en el blog, pero algo hay que subir. Son tiempos de escasez.

miércoles, 22 de julio de 2009

El Caminante

Un cuento simple, escrito de un tirón. Experimentando con las palabras, sublevandose ante la escritura clásica. Espero que les guste.

El Caminante.

La noche parecía estar ebria. Comenzó a caminar con paso firme, balanceando los brazos a los costados de su cuerpo. Tenía la frente empapada en sudor, y un espectro de preocupación danzaba en sus ojos. Debía llegar temprano, lo más temprano posible. Apuró las piernas.
La luna vigilaba sus pasos, y él se sentía incómodo. De tanto en tanto volvía la vista hacia arriba, pero nunca parecía encontrar lo que esperaba. Con decisión proseguía su viaje, soportando en sus hombros la fatal idea de que quizás no llegaría a tiempo. No podía permitírselo. Resopló.
Al doblar en una esquina, prendió un cigarrillo. Hacía meses que no fumaba, pero la suerte había querido que en el bolsillo interno de su chaqueta todavía estuviera el aplastado paquete de Malboro. Necesitaba sentir el humo escurrirse de sus labios. Lo apaciguaba.
O al menos eso creía, pensó. Seguía igual de tenso que antes, y sentía que no había forma de parar a los nervios que lo devoraban más que llegando a donde debía llegar. Pero el reloj no mostraba signos de piedad.
Empezó a correr. Tiró el cigarrillo a medio acabar, y se limpió la transpiración con la mano. Miró hacia el cielo una vez más.
Sus pies consumían los metros sin pausa, y la ciudad a su lado parecía moverse cada vez más rápido. Tal vez si seguía así pudiera lograrlo. La fe lo había abandonado ya hacía tiempo, pero igual soltó unas vagas plegarias. Maldito hipócrita, se dijo. Y se río de su propia mente.
Continuó la carrera. Sin embargo, no duraría mucho más. Varios metros más allá de la avenida, cayó de bruces. Un punzante dolor se había clavado en su estómago, y lo atacaba. Maldijo a voz de grito, con todo lo que sus pulmones le permitían. Era inaudito. Un ultraje de proporciones casi ilegales. Debía llegar, por el amor de Dios. Y sus piernas se negaban a responderle.
Se dejó caer sobre el asfalto. Ahora que la veía en todo su esplendor, la luna parecía más grande que nunca. La insultó. No sabía porqué lo hacía, pero simplemente lo hacía. Quería descargarse con el mundo. Estaba furioso, y la sola idea de que ya no llegaría lo relegaba a un sentimiento que hacía temblar a su lado racional. Quería venganza.
La humanidad le había jugado una mala pasada. Y él tomaría cartas en el asunto. Las tomaría, y las prendería fuego. Quería ver arder a la noche. Maldita ciudad de almas vagabundas. Maldito dolor de estómago. Maldito él.
Se levantó, con los brazos cruzados sobre el abdomen. Paso tras paso volvió sobre su marcha. Era hora de volver a casa. De todos modos, jamás habría llegado, pensó. Y volvió a reírse de su propia mente.
Prendió otro cigarrillo. Entraría a su departamento, y se embriagaría. Tal vez una ducha, tal vez una llamada a una de las chicas. El mundo estaba en ruinas, y él se sentía a gusto con su rol de artífice del caos. Esa era su venganza. Total, era uno entre millones. Todas almas vagabundas, volando hacia el mismo lugar. Hacia el mismo destino. Se rió. Maldito y miserable destino.

domingo, 5 de julio de 2009

Death Sentence (James Wan, 2007)



James Wan es un director que sabe como provocar sensaciones en el espectador. No hace mucho vi una olvidable película de John Carpenter, que sin embargo, entre extrañas escenas que no se resolvían, dejó un reflexión interesante: uno, al sentarse en la butaca, se entrega por completo a la visión del director, confía en él, y le da permiso para llevarnos un viaje cuyas vueltas solo él conoce.
Wan no dudó en aprovecharse de la confianza que depositamos en él: con su film Saw (El juego del miedo por estos pagos), llevó la tensión a niveles nunca antes alcanzados en la pantalla. Así se perfiló un director que uno debía tener en cuenta a la hora de ver una película.
En este caso, Death Sentence es la película. Y Wan vuelve una vez más a ponernos al borde del asiento.
La historia se centra en Nicholas Hume (Kevin Bacon), un padre cuya estable vida se vuelca tras el asesinato de su hijo en una gasolinería. Tras apuñalar él mismo al asesino de hijo, comienzan a sucederse una serie de eventos que irán haciendo mella sobre Hume, llevandolo a niveles insospechados en su sed de venganza.
La correcta y sensible intepretación de Bacon permiten a uno acercarse al personaje, y vivenciar paso a paso el camino de un hombre con una familia que proteger, y una "sentencia de muerte" puesta sobre ella.
Wan manipula las cámaras con velocidad, brindandole adrenalina a las secuencias de acción, y sabe cuando bajar la marcha. Es en esos momentos en que la música se vuelve sensible, cuando pasan las cosas que hacen al espectador sufrir y compadecerse.



Lejos del terror presente en filmes como Saw o El Silencio de la muerte, Wan nos regala una película de acción con un trasfondo cargado de dramatismo. Un Bacon que tenía olvidado resurge (ya desde otra película que vi hace poco), y nos deja con la pregunta y casi automática respuesta: ¿Qué hacemos cuando nuestros seres queridos son arrebatados de nuestro lado? ¿Qué hacemos si tenemos la oportunidad de hacer pagar a los culpables? ¿Abrimos fuego? Claro que sí.

martes, 30 de junio de 2009

La Balada del Toto y El Pollo

Llamo al público a entender lo precario del cortometraje que verán a continuación. Filmado con una web cam, una tarde de otoño, con un cast and crew compuesto por una sola persona, la cinta califica dentro de lo que solemos llamar MALO. Sin embargo, acá esta.

miércoles, 6 de mayo de 2009

Desfigurado de Salvador Sanz



La historieta de Salvador Sanz, que se publicó en la década del '90 a lo largo de ocho años, abre sus puertas con una singular frase:

"Hay dos maneras de irradiar luz: ser la propia fuente de brillo, o el espejo que la refleja"

Así, el lector da inicio al peculiar viaje que significa leer Desfigurado, un comic oscuro, con la belleza de un Buenos Aires en las sombras de un futuro inminente. Los trazos blancos sobre un fondo negro acompañan el ritmo agotador de incertidumbre que sobrevuela la historia. Sanz puro y en su estado más salvaje.

Para un gran número de lectores, es inevitable la comparación con el film Matrix, porque desde el vamos el autor juega con una realidad que se desdobla, se transforma en sueño y vuelve a su forma original. El tiempo y el espacio se plegan, y esto no hace más que enfatizar las palabras que Borges escribiera, y con las que todos alguna vez nos hemos vuelto un tanto paranoicos: "Somos el sueño de otro".

Pero si pensamos que Desfigurado fue escrita antes de que los hermanos Wachowski se pusieran a garabatear su epopeya de ciencia ficción, y lo que es más, que fue escrita en la Argentina, la obra se vuelve imponente. Es el trabajo de un artista con una visión desmesurada, y una forma de plasmar las imágenes que cargar de locura y dramatismo a cada cuadro.



La fuerza de un relato tradicional, al mejor estilo de un implacable policial clase B, seducido por una temática posmoderna y con raíces filosóficas, hacen a Desfigurado un gigante del comic argentino, en una década que significó un descenso para el noveno arte argentino. Vale la pena el gastito de 20 pesos.

martes, 5 de mayo de 2009

Fapp: El comienzo.

Hola! Bienvenidos al blog de Fapp Inc., una organización comandada, escrita, dirigida y protagonizada por un único individuo: yo. Sí, yo, el que aprieta las teclas en este momento. Fapp para los amantes del chat. Marcos para los entendidos.

La idea de este espacio es la de exponer mis ideas, comentarios, trabajos, y todo aquello relacionado al arte, cine, música, literatura, comic, en tanto me sea posible.

Dicho esto, me despido. Ya me leerán.



Foto del día:















El gran Pollo de Goma, desde los arrabales de mi pieza, para usted. Que lo disfrute.